Desde hace unos años escribo algunos cuentos y relatos. Lo hago porque me gusta escribir y porque deseo que los niños disfruten leyendo las pequeñas historias que creo. Nada me gustaría más que los niños pidieran otro libro al terminar de leer uno de los cuentos. De modo que este es mi principal objetivo: que disfruten con la lectura y que tengan experiencias gratas con ella.
Ahora bien, esa experiencia de ocio creativo puede encerrar en sí misma otros valores. Cuando escribo tengo presente tres áreas de valor que os explico brevemente con tres palabras:
1º Sensibilidad. Los cuentos y los relatos pueden favorecer la sensibilidad de los pequeños ante la naturaleza, la riqueza de colores y formas de la realidad, desarrollando el asombro y la imaginación.
2º Inteligencia. Los relatos invitan a entrar en una historia, en un mundo que hay que comprender. A veces nos llevan a un tiempo anterior o nos muestran un enigma a descifrar. Contribuyen con ello a desarrollar la inteligencia creadora.
3º La conciencia. Los cuentos pueden ayudar a que el niño se ponga en el lugar del otro, a desplegar su mirada compasiva y a desarrollar otros valores. Se abren así a la dimensión ética.
Estas áreas de valor solo se favorecen si los pequeños tienen una experiencia de disfrute con el cuento o el relato. Por eso es importante que estén bien escritos, les interesen y les atraigan. Si gozan con la lectura, estos valores irán desplegando su riqueza en el interior de los pequeños.
Este blog está pensado para que los padres acompañen a sus hijos en esta aventura gozosa. Mi deseo es que los niños disfruten con los textos que he escrito y con los audios que iré grabando. Necesito vuestra complicidad para llegar a ellos y me gustaría que fuera una oportunidad para tener una experiencia compartida y gozosa.