A Platero le gustan los piñones
A Platero le gustan los piñones
Audio 7,A Platero le gustan los piñones. Platero y las palabras olvidadas
Ilustración de Elisa Amann
Ya sabemos que a Platero le gustan las naranjas, las mandarinas, las uvas moscateles y algunos frutos más que te he pedido que busques. La niña chica ofrece piñones a los niños:
—¿Os gustan los piñones? —preguntó la niña chica.
–No sé —respondió Ixone—, no los hemos probado nunca.
—Venid, dentro de la cabaña tengo algunos.
Los piñones son unos frutos pequeños que dan algunos pinos. En el entorno de Moguer hay muchos de esa especie y el fruto se puede comer.
Pino de Fuentepiña, Moguer
La niña chica tiene algunos guardados en su cabaña. Los saca y les enseña a pelarlos y comerlos:
—Ahora, cómelos de golpe, que se llena toda la boca y así saben muy buenos.
La niña chica y Rocío saben que a Platero le gustan mucho. Tienen que darle un buen puñado porque enseguida se los traga y le saben a poco. Rocío les explica que ella recoge piñones y los vende. Los niños se quedan extrañados:
—Yo recojo muchos piñones y los vendo —explicó Rociillo.
—¿Tú vendes piñones?
Ixone pensó que a ella también le gustaría, pero seguramente su ama no le dejaría ir a venderlos.
—Sí, los llevo en una cesta y los vendo en el pueblo así: Tostadiitos, piñoneee… tostadiitos…
Entonces todos se rieron porque Rociillo lo había dicho cantando, cogiendo con un brazo la cesta de su amiga, cargada de piñones.
La niña chica ayuda a su padre en el naranjal y Rocío vende piñones. Te sorprende ¿verdad? Ya sabemos que hemos hecho un viaje al pasado, un tiempo en el que muchos niños trabajaban y tenían una vida difícil. Así ocurre con la niña de la carretilla que lleva los albérchigos. Lo veremos otro día.
>Audio 6. . Platero y yo.
Y ahora te toca a ti:
En Platero y las palabras olvidadas es Rocío la niña que vende piñones, pero en el texto de Platero y yo que he leído aparece otra niña.
¿Cómo llaman a esa niña, «que pregona larga y sentidamente: ¡A loj tojtaiiitoooj piñoneee…!”?